La Paz, 29 de agosto (RC). – El gobernador de Tarija, Adrián Oliva, lamentó que la burocracia estatal espantara la llegada de dos aeronaves, provenientes de Jujuy Argentina, dispuestos a ayudar en la Chiquitanía a apagar los focos de calor que se registran en el sector.
El pasado 22 de agosto, Oliva mencionó que dos aeronaves, provenientes de Jujuy, Argentina, arribarían en esos días a Santa Cruz, para ayudar a sofocar los incendios en la Chiquitanía. Sin embargo, señalo que las autoridades de Jujuy solo esperaban una autorización del gobierno boliviano para mandar a las aeronaves a la Chiquitanía.
“Hay dos helicópteros que estaban a la espera de la autorización para ingresar a Bolivia, que podrían estar apoyando en todas las labores que están desarrollando en este momento y, también, había un ofrecimiento de un avión hidrante. El tema es la tardanza, ahí está el peligro. Hemos perdido probablemente muchos días de esa ayuda”, manifestó Olivia.
Asimismo, Oliva denunció que por una demora en la otorgación del permiso de parte del Gobierno boliviano, la ayuda ofrecida por Argentina fue destinada a otros países que también batallan contra las quemas. «No tomemos el tema de la ayuda internacional como un problema de soberanía o que estemos discutiendo la capacidad, o la auto suficiencia que tenga el estado, sino entendamos que este es un desastre que debemos declararlo, que debemos intervenir», expresó Oliva.